La Máquina porfin encontró la portería.Tuvo que venir Javier Orozco desde la banca para encarrilar el rumbo, marcar un doblete, demostrar cómo se concretan las oportunidades y dar a Cruz Azul la victoria por 2-0 sobre Puebla, que colocó al equipo eventualmente en el liderato general del torneo.
El fantasma de las polemicas decisiones arbitrales en contra de la Máquina volvía a asomarse en el Estadio Azul, pero tuvo que venir desde la banca Javier Orozco para auyentarlo.
Un remate de cabeza de Orozco al minuto 77 impuso justicia por lo demostrado sobre la cancha. El festejo fue efusivo por toda la parcialidad celeste, anciosa de ver en el fondo de las redes el esférico que se paseaba a lo largo y ancho del área en busca de alguien que la mandara a guardar.
El tiempo transcurrió cada vez con mas certeza de que Cruz Azul se llevaría la victoria y el héroe de la tarde se encargo de confirmarlo. En el minuto 90 disparó cruzado, de derecha, para asegurar el resultado y recuperar la confianza perdida ante la falta de gol para cerrar el torneo.
¡VENGA CHULETA! gritaba la afición celeste en repetidas ocasiones para despedir a su héroe de la cancha
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